El Arte urbano se hace rural.

Autor Diane Cambon
Mural de Zeta1970 en Jarandilla de la Vera

En el centro del mural, aparece una banda de música. A su alrededor unos danzantes bailan, girando alrededor de un mástil con unas citas de colores. Situado en el centro de Jarandilla (Calle Antonio Serrano, 4), este mural de trazos vivos es una de las tres obras pictóricas de arte urbano que alegran las fachadas de este pueblo de la Vera. Creado por el artista gráfico Zeta1970, «Los danzantes» tiene como propósito resaltar la tradición y el folklore de la comarca. En el proceso creativo, Zeta1970 se inspiró en unas fotos del archivo histórico de Jarandilla.

«Era primordial captar la esencia de la identidad rural. Hice un ejercicio de investigación y quise destacar el tradicional baile verato de los danzantes. No hay que olvidar que el Street Art y el Grafiti conviven de manera muy orgánica con el entorno donde se desarrolla, porque tiene que ver con las inquietudes e influencias de los artistas», asegura el autor Zeta1970, que suele colaborar con los grandes del street art español como Suso33 y Hosh, y también ha puesto su arte al servicio de marcas como Nike, Absolut y Coca-Cola.

Cada vez son más los pueblos en España que cuentan con murales pintados, obras que además de su valor artístico, conectan de una manera especial con sus vecinos. Recuerdan sus raíces, rinden tributo a sus mayores, a su pasado, su presente y contribuyen a afrontar con optimismo un nuevo futuro. Los murales en los pueblos de La Vera forman parte de la VI edición de «Muro Crítico», Festival de Arte Urbano en el Medio Rural promocionado por la Diputación de Cáceres y que atrae a artistas de toda España así como internacionales, aspira a resaltar la identidad rural sin caer en los clichés. «Nos inspiramos en la esencia del mundo rural pero dándole una visión artística, muy moderna», comenta Brea (1982), grafitero placentino que intervino en la edición del pasado año en el pueblo de Losar de la Vera.

Mural del muralista placentino Brea en Losar de la Vera

En cada edición de Muro Crítico son unos cinco a diez pueblos de menos de 3.000 habitantes los que se apuntaron a transformar alguna de sus antiguas fachadas en una obra de arte urbano. Alrededor de 60 murales ya se pueden apreciar en la región de Cáceres, entre ellos en los pueblos veratos de Aldeanueva de la Vera, Talaveruela de la Vera, Collado de la Vera, Madrigal de la Vera y Torremenga. Cada uno es único y fue concebido por cada artista, según unas pautas indicadas por «Muro Crítico» y con temáticas relacionadas con la sociedad rural contemporánea y la sostenibilidad medioambiental.

Mural de Kolejo en Losar de la Vera
Mural de DigoDiego en Madrigal de la Vera

«La idea con este proyecto es también potenciar la convivencia entre lo tradicional y una visión más actual del mundo»

En Losar de la Vera, el artista Brea eligió por ejemplo un diseño realista al representar un zorro, animal destacado dentro de la fauna local. Es sin duda el mural más apreciado por los habitantes del pueblo, aunque los colores y líneas abstractas de la obra de Rosh333 no dejan indiferentes a nadie. Conocido como Rosh333, este artista alicantino sorprendió a los lugareños con su mural, donde los colores vivos forman una composición geométrica. «Normalmente trabajo con líneas verticales pero ya que detrás del muro del edificio se ve la línea horizontal de la cresta de la sierra quise incorporar esta línea natural de la Montaña a la estructura del dibujo», explica Rosh 333. 

Mural de Rosh333 en Losar de la Vera
Mural de Sebas Velasco en Jarandilla

Estas intervenciones no dejan de representar una apuesta artística arriesgada dentro del entorno rural y la arquitectura de los pueblos, tal como lo demuestra el mural de Sebas Velasco, en la calle principal de Jarandilla. El objetivo de su obra es resaltar la identidad rural contemporánea. Se ve a un joven en un ambiente más bien urbano, de fondo una gasolinera, lo que contrasta con la imagen habitual del campo. «La idea con este proyecto es también potenciar la convivencia entre lo tradicional y una visión más actual del mundo», asegura Zeta2017 subrayando que los murales constituyen también un foco de interés para los amantes de las artes y son otro atractivo turístico para los pueblos veratos donde se mezclan varias tendencias culturales.

Mural de SOJO en Torremenga